Cuando digo “empresas familiares” me refiero a las pequeñas y medianas
empresas o “pymes” como les decimos en México, aquellas en un rango de 10 a 250
empleados.
Por supuesto que en México y en el mundo existen grandes empresas
familiares, bastaría con mencionar a las transnacionales mexicanas más
importantes como Bimbo, Herdez, Carso, Industrias Peñoles, Banorte y muchas
otras que son ejemplos de éxito.
Sin embargo hoy quiero referirme a las pequeñas y medianas empresas
familiares, de las cuales se han publicado gran cantidad de libros, estudios y artículos
acerca de la importancia de las pymes en México que podría resumir en 3
indicadores básicos: el 65% de la Pymes
son empresas familiares, estas generan
casi el 70% de la oferta laboral en México lo que tiene un impacto en el PIB de más del 51%.
Si las pymes familiares son importantes para la economía de nuestro país,
la pregunta sería ¿cuáles son los retos?
Yo identifico 5 retos básicos
desde mi experiencia personal como empresario pyme – familiar en el sector
servicios y turismo principalmente, con poco menos de 300 colaboradores y son
los siguientes:
Abordare más adelante en otro post, el tema familiar dentro de la
estructura de la empresa, uno de los mayores retos INTERNOS que enfrentamos,
para centrarme de inicio en los retos EXTERNOS (el entorno).
Los retos externos:
· Las pymes somos más
vulnerables que las grandes empresas a los cambios o factores externos, lo
mismo nos afecta un cambio o conflicto social, como los efectos de los
disturbios en contra del aumento en los combustibles hace apenas unos días,
pues por razones obvias muchas empresas o comerciantes no tienen los seguros
que amparen los daños causados, o simplemente la imagen de lo que sucedió en
Veracruz nos afecta indirectamente a los prestadores de servicios turísticos,
pues es innegable que generó en nuestros posibles visitantes una percepción de
riesgo que inhibe la llegada de turistas.
(apenas
unos días atrás un amigo hotelero me comentaba que la ocupación en Veracruz –
Boca del Río en Enero de este año está en los niveles del trágico 2011, cuando
desafortunadamente se registró la más amplia problemática de seguridad que nos trastoco
no solo como Destino Turístico sino a toda la sociedad; y en donde la industria
turística de Veracruz fue duramente afectada.)
· De igual forma las
pymes turísticas están directamente más expuestas, que una gran empresa, a las
acciones que hagan o dejen de hacer las autoridades en los 3 niveles de
gobierno; es decir en el caso concreto la actividad turística es vulnerable por
su transversalidad con otros factores como son: la infraestructura carretera
por mencionar una, la seguridad (o lo que es más delicado “la percepción”
equivocada de que Veracruz no es un destino seguro, cuando si lo es), ya que las
pymes turísticas que en Veracruz somos la gran mayoría, tenemos una alta
dependencia de lo que en materia de promoción turística se haga.
· La escases de recursos
y los recortes al gasto público en todas las áreas y niveles de Gobierno, nos
afecta no solo en la escases de recursos para la promoción turística; con la
que se busca atraer a más visitantes o la atracción de sedes o desarrollo de
grandes eventos, sino también nos afecta por la reducción del gasto propio de
las dependencias municipales, estatales y federales en gastos de viáticos como
alimentos, hospedaje o eventos propios oficiales, cuya disminución ya se siente
desde tiempo atras en hoteles, restaurantes y servicios en general; en todo el
estado y en todas los establecimientos turísticos, unos en mayor medida que otros,
la llamada “Cuenta de Gobierno” en restaurantes, operadores y hoteles de todas
las categorías ha disminuido drásticamente.
· Por los motivos
señalados antes, se vuelve sumamente importante que los empresarios del sector
unan esfuerzos, es muy difícil en lo individual que un hotel, un prestador de
servicios, un restaurante haga la promoción del destino por sí solo, o peor aún
que lo hagan grupos selectos sin incluir a todos, o por tintes políticos e
interés personales o disfrazados de organizaciones no lucrativas; el turismo en
Veracruz lo hacemos todos y debemos hacerlo lucrativo, cuando entendamos que
lucrativo quiere decir que con ello se pagan salarios, impuestos, inversiones,
activos, y desarrollo de nuevos productos para hacernos un destino más competitivo,
cuando entendamos que con los salarios y gastos que pagamos el circulo virtuoso
de la economía sigue su ciclo y beneficia a escuelas, comercios, zapaterías,
artículos escolares, medicinas, viajes y consumos que nuestros empleados y
proveedores gastan en Veracruz para darles lo mejor a su familia.
· Si queremos levantar
muros como Trump en el turismo de Veracruz, los únicos afectados somos nosotros
mismos, porque cada quien habrá de seguir buscando la manera de continuar
haciendo su negocio rentable (bajando precios por ejemplo que obvio nos afecta
a la larga) ya sea aquí, en otro destino o segmento, pero un restaurante,
incluso el centro de convenciones o un hotel, es casi imposible que cambie de
giro o que se lo lleven a otro lugar; y actuar de esta forma nos puede poner en
un escenario económico ya de por si complicado ante la situación económica de
Veracruz y de todo México, que incluye sin duda la falta de empleo bien
renumerado o aun peor la pérdida de más empleos.
No quisiera parecer como dicen “catastrofista” pero creo que hoy en un
entorno global como el que estamos viviendo, la competencia no está en
Veracruz, la competencia está en otros destino; en destinos tradicionales que
están innovando, en destinos emergentes que están haciendo mucho más allá de lo
convencional, en destinos que están regalando e incentivando con todo la
atracción de eventos hacia sus nuevos o actuales recintos.
Lo positivo de estos retos es que tenemos muchos otros mercados también que
explotar y que Veracruz tiene a la mano, como bien se está apoyando el Turismo
Deportivo, hagamos lo mismo con el turismo extremo o de aventura, el turismo
inmobiliario, el cultural, el turismo social en fechas de oportunidad, el
desarrollo por parte de la iniciativa privada de eventos autosuficientes como
conciertos, deportivos, náuticos o culturales. Si las autoridades responsables
apoyan a los empresarios veracruzanos, no con recursos, solo con las
facilidades necesarias, estoy seguro que las ideas y proyectos saldrán como
aquellos festivales artísticos, culturales y gastronómicos pasados o muchas
otras ideas nuevas.
Ante la crisis económica internacional, tenemos que incentivar hoy más que
nunca el turismo interno, pero también tenemos que renovar la oferta turística
innovando con nuevos productos, todos sabemos que también tenemos que reinvertir
en nuestra infraestructura, hoteles, operadores, restaurantes e incluso el
centro de convenciones, pero para ello necesitamos recursos y ventas que suenen
en la caja registradora de las empresas turísticas; y esto es tarea de todos.
Por ultimo quisiera dejar claro algo, muchos que me leen saben de mi paso
por la administración pública algunos pueden estar de acuerdo con mi gestión y
muchos otros no, y lo respeto, pero eso ya pasó y como lo he dicho siempre aquí
estoy y estaré siempre para atender de frente cualquier tema relacionado a
ello.
Lo que hoy público y he publicado desde noviembre pasado, lo hago y lo seguiré
haciendo siempre con respeto a todos, con respeto a la diversidad de opiniones,
a las autoridades encargadas del turismo en sus 3 niveles de gobierno; y lo más
importante, lo hago como empresario turístico desde hace 30 años y porque esta
actividad me apasiona y porque siempre he creído que el turismo es el camino más
rápido para generar bienestar social en todo México.
Que tengan un excelente domingo!
Harry Grappa Guzmán